Una habitación, un televisor de 21 pulgadas puesto en canal 3, una consola Sega y un juego de pelea. Tres niños sentados sobre una colchoneta, detrás una cama desarmada con dos niños más mirando la lluvia por la ventana. Se escucha un trueno y la tele se apaga, la abuela entra, desenchufa el televisor y sale de la habitación, un intenso aroma a torta fritas llena el espacio.

Cruzando el pasillo, bajo la luz de la vela la abuela amasa una mezcla, abre la alacena y una ranita salta sobre su vestido rojo, la toma con las manos llenas de harina y la vuelve a meter en el mueble. Al darse vuelta ve a los niños sentados alrededor de la mesa con la vela encendida en el centro la abuela empieza a hablar:

Cuando era chica, un día estaba caminando por el puente de Vedia, allá cerca del río de Oro, y me encontré con una viejita que me pidió ayuda, se le había quedado su pie enganchado en un agujero del puente.

Cuando la ayudé a sacar su chancleta, vi que se queda mirando para el cielo, me señala el piso y me dice que antes el cielo estaba abajo y la tierra arriba, que en el medio había un árbol gigante que los unía. Cuando la tierra empezó a ensuciarse, la gente del cielo pidió que los cambien de lugar, pero el árbol siguió ahí.

Los Tobas siempre comían de ese árbol, subían los mas jóvenes a buscar comida, la gente grande iba, esperaba y les bajaban los alimentos. Hasta que un día los jóvenes bajaron y se fueron con todo, sin darles nada a los mayores.

Entonces un gran fuego apareció por el horizonte quemando todo, hasta el árbol. Solo algunos hombres lograron sobrevivir escondiéndose en pozos, después de eso nunca mas vieron el árbol.

Algunos dicen que sueñan con un árbol negro y que si lo trepan se despiertan con poderes._

Este podría haber sido un relato de mi abuela Maxi, "la Cuicha", pero no lo es. Es simplemente un fragmento de mis recuerdos. Los Qom dicen que somos espíritus corporizados y que nuestro cuerpo es un archivo de nuestros antepasados, por eso me presento a través de mi abuela.

Aunque por cierto, mi nombre es Dani y soy diseñadora en Hidden People Club, este año junto con el equipo, decidimos rediseñar "Laidaxai", un juego que cuenta la historia de una niña perteneciente a la comunidad Qom del norte de Argentina que sueña con el Árbol Negro. Un árbol mágico rodeado de seres que nos enseñan un poco más sobre nosotros mismos y nuestro espíritu, pensando más allá de lo tangible en el mundo de los sueños. De a poco vamos a ir mostrandoles avances de este relato.

Por lo pronto, ella es Laidaxai ♥ con su N'vike, un instrumento de su cultura.

ÑACHECK!/Gracias!